7.14.2012

Nada.

Hace tiempo que sospechaba de que la vida no es como la pintan, pero hoy estoy seguro. Naces solo, creces solo, mueres solo, hay días que ni siquiera tú mismo te controlas además de no aprender nada... Rompemos lo que de verdad amamos y lo que buscamos es amor, pero no lo encontramos. ¿Y qué se puede hacer cuando te olvidas hasta de tu nombre? ¿Qué más se puede perder, si en la vida no has ganado nada? No hemos hecho ninguna hazaña en la vida y tenemos el orgullo de quejarnos de que nos va mal. Jugamos con fuego y nos quemamos, tropezamos con la misma piedra y volvemos a tropezar. Obcecación, obsesión, tozudez, cabezonería que termina, como todo, que es efímero. Pasado, presente y futuro teñido de negro. Te rindes y te hundes en la nada, ¿y después, qué queda? Nada.

7.03.2012

Un mágico suspiro en el aire.

Es la emoción dentro de unos ojos, saber el valor que tiene tener una motivación por la que luchar en tu vida, los pétalos de la flor se van cayendo pero siguen creciendo poco a poco con las horas y los días. Los niños que correteaban en mi interior se murieron hace tiempo por miedo, pero seguimos celebrando que estamos vivos. La magia es la fascinación por lo desconocido, todos somos magos en los momentos dramáticos, en momentos de tensión. Reflejos de ilusiones en misteriosos espejos que brillan en la oscuridad de nuestras almas. Detrás de cada acción, de cada gesto de las personas hay balazos que duelen, pero no matan. Que los prejuicios no nos engañen, nadie vive para siempre, arriesga todas tus cartas en una sola jugada, nadie te podrá decir si ganas o pierdes. Ilusionistas de una vida, el futuro son preguntas, la vida es una película, que comience el espectáculo.

6.25.2012

Ansiedad y prioridad.

Entre los miles de pecados de la vida, puede que destaquen dos: La ansiedad de querer aparentar lo que no se es y la prioridad de fomentar el desinterés.

Leve rumor de saxofón.

El tiempo son renglones,
y renglones son las horas,
que pasamos tú y yo, 
aquí juntos, a solas,
por eso el amor,
no se compra con billetes,
pero sigo encerrado
en mi propio martes trece.
De tripas corazón,
sálvese quien pueda,
la vida es una rueda,
que no para de rodar,
de avanzar, de jugar,
sólo toca esperar
a ese tiempo 
que me pueda relajar.
Rap, jazz y a volar,
como en ciencia ficción,
superando realidad,
dejando atrás las puertas
que dan paso a la maldad.
Unos versos pasajeros,
entre llamas junto al fuego,
buscando mensajeros,
que respeten mi palabra,
como un abracadabra,
con magia 
ya verás que todo cuadra.
Pasado futuro y presente,
no vivo de la gente,
me da igual lo que piensen,
cada uno es muy suyo,
lo intuyo, 
busco respeto, amor y cofort,
es lo suyo. 
Siervo del verbo,
luchando con mi ego,
poesía es mi musa,
amor con estos versos,
suaves, como el terciopelo,
me niego a ver mi realidad,
es mejor soñar,
y contar las nubes blancas,
tantas, que mi cabeza estalla.
Cual Venecia sin canales,
me siento tan vacío,
un nudo en la garganta,
 todo parece un lío,
pero al final siempre cuadra,
nunca subestimes el amor
que puede dar una palabra.

6205.

Vivo en un mundo donde la prioridad nunca será la bondad, de hecho sólo reina y reinará la maldad. En la ciudad, engañamos al tiempo con sueños que no son. Tú procura engañar suavemente al silencio, intenta que tus palabras nunca se las lleve el viento. La vida sólo es una y sólo una es la respuesta, pero, ¿cuál? ¿Cuál es el problema de estos males, de los cuales ni me acuerdo? Recuerdos mientras paso por un parque, la sabia ignorancia que se escapa mientras van creciendo años, cada día un poco más alto, cada día un poco más sabio. Dulce glaseado hipócrita alrededor de un mundo que se pudre poco a poco, el humo nos envuelve y las calles son rutina, paso a paso retocedo y me duermo en la doctrina de la vida, donde me creo Dios pero no soy nada más que un nombre y dos apellidos plasmados en un plástico.